Desde que S.S. el Papa Pío VII declarara a Nuestra Señora del Mar como Patrona de Almería, en mayo de 1806, se han venido celebrando en nuestra Ciudad fiestas en su honor, limitadas en un principio al culto religioso, y engrandecidas luego por el Rey Carlos IV con la concesión de una feria de ganado, que con el devenir de los años se ha convertido en las actuales Feria y Fiestas en honor de la Patrona.

Como preparación a la fiesta litúrgica de la Virgen del Mar (sábado anterior al último domingo de agosto) la Hermandad celebra un Triduo en su honor, que cuenta siempre como celebrantes con destacados miembros de la Orden de Predicadores, los Padres Dominicos que desde hace cinco siglos son sus guardianes y custodios.

El día de la fiesta litúrgica tiene lugar a primera hora de la mañana la misa que ofrece la Hermandad de Gloria de Nuestra Señora del Rocío de Almería, gozoso inicio de una jornada llena de emociones.

A las doce del mediodía sale la Imagen Vicaria portada en el templete por hermanos horquilleros y se reza el Ángelus. Comienza la ofrenda floral del pueblo de Almería a su Patrona. Son casi dos horas de continuo desfile de los almerienses para felicitar a su Madre poniendo a sus pies unas flores, reviviendo la ofrenda que las playas del Alquián hicieron a la Imagen cuando aquella noche de diciembre de 1502 arribó a nuestras costas, alfombrándose la arena con las azucenas que aún hoy podemos contemplar. En la ofrenda participan diversos colectivos y asociaciones de toda índole, cofradías, colegios profesionales e instituciones oficiales, encabezadas por el Ayuntamiento de la Ciudad. Igualmente están presentes la Legión –acuartelada en el Tercio de Viator- y las fuerzas y cuerpos de seguridad, que aportan una nota de espectacularidad al acto.

Terminada la ofrenda floral, la Hermandad abre las puertas del camarín donde todo el año se haya expuesta al culto la Imagen de la Virgen. Interminables filas de fieles esperan su turno para saludar a la Patrona, verla de cerca, rezarle, pasar a los niños bajo su manto y recibir una estampa como recuerdo de la visita. Al finalizar, cuantos lo desean pueden saludar a la Madre estampando su firma y una dedicatoria en el Libro de Visitas de la Hermandad.

Por la tarde tiene lugar la última jornada del Triduo, seguida del canto de la Salve Marinera y el Himno de la Coronación, siempre a cargo de la Coral Virgen del Mar.

Ya el domingo, último día de la Feria, tiene lugar el solemne Pontifical presidido por el Obispo de la diócesis y concelebrado por el Cabildo de la Catedral, Padres Dominicos y diversos sacerdotes. Asisten las Autoridades civiles y militares y las Hermandades filiales. Canta la Coral Virgen del Mar.

El domingo por la tarde, en torno a las 20:45 horas, da comienzo la Procesión de alabanzas, con la participación de las entidades mencionadas así como representaciones de las hermandades y cofradías de la capital y de diversos pueblos de la provincia. La Virgen del Mar luce esplendorosa sobre las andas realizadas en plata de ley por los talleres de Villarreal, de Sevilla, con exorno floral de nardos –la flor de nuestra Feria- que va inundando las calles con su fragancia. Es aquí donde se desbordan las manifestaciones de cariño hacia la Patrona, con los balcones del recorrido engalanados para la ocasión, de los cuales se derrama generosa una lluvia de pétalos al paso de la Imagen. El Papa Pío VII, en un Decreto firmado en la Basílica de Santa María la Mayor de Roma el 16 de mayo de 1806, concedió indulgencia plenaria a todas las personas que acompañen a la Virgen del Mar cuando salga en procesión por las calles de Almería, o en rogativa, con ocasión de calamidades públicas.

Desde hace varios años, al llegar la procesión a la Plaza Emilio Pérez, se vuelve la Imagen hacia el mar y se le canta el Himno compuesto para la Coronación Canónica, con letra de Manuel del Águila y música –una preciosa barcarola- del maestro José Padilla. Cuando el cortejo, después de tres horas y media, regresa al Santuario, el Sr. Obispo dirige unas oraciones y el canto de la Salve. Y la Virgen del Mar vuelve a su casa entre vivas y aplausos, iluminada por el resplandor de los fuegos artificiales que ofrece el Ayuntamiento. Desde su camarín velará todo el año por sus hijos almerienses y recibirá a diario la visita de sus hermanos y devotos, recogiendo sus plegarias y escuchando sus necesidades y anhelos.

Desde el año 1992 la Hermandad consideró la posibilidad de establecer un acto que sirviera de pórtico a los cultos del Patronazgo. Así nació el Pregón de la Virgen del Mar, como una tribuna destacada para cantar las glorias de María, meditar con Ella y su divino Hijo y glosar los hechos que desde su Aparición conforman el ser religioso de los almerienses. Han pregonado a la Santísima Virgen:

• 1992 – José Fernández Revuelta
• 1993 – Rafael López Usero
• 1994 – Juan R. Aguilera Martínez
• 1995 – Juan López Martín
• 1996 – Francisco Jiménez Alemán
• 1997 – Ginés García Beltrán
• 1998 – José María Álvarez de Manzano
• 1999 – Alfredo Martínez Almécija
• 2000 – Cristóbal Cervantes Hernández
• 2001 – Juan Antonio Gómez-Angulo Rodríguez
• 2002 – Rafael Martínez Durbán
• 2003 – Gustavo Villapalos Salas
• 2004 – Carmen Enríquez Medina
• 2005 – Francísco de Asís Benítez Salas